Teatro Lunático, "Estocolmo"
MUESTRA DE TEATRO UNIVERSITARIO
Auditorio Hospedería Fonseca • 21:00 h
Entrada libre hasta completar el aforo
Lunes 19 de abril
TEATRO LUNÁTICO
Estocolmo
Dramaturgia y dirección: Catalina García García-Herreros
Dramaturgia y Dirección: Catalina García García-Herreros
Vivir quiero conmigo,
gozar quiero del bien que debo al cielo,
a solas, sin testigo,
libre de amor, de celo,
de odio de esperanzas, de recelo
Fray Luis de León
Felices los flexibles
Juan Antonio González Iglesias
PIEZA TEATRAL EN TRES PÁRRAFOS
Párrafo primero
Aniquilar no es vencer
Párrafo segundo
Resistir no es alcanzar
Párrafo tercero
«Felices los flexibles»
REPARTO POR ORDEN DE INTERVENCIÓN
Julia Rosales Shirin Azarnoush
Mateo Robles Villena Juan Medina Gallego
Pablo Márquez Miguel Tomé Caballero
Lucas Almansa Miguel Velasco Hermosa
Marta Figueroa Claudia Sánchez Gutiérrez
Diseño de luces Esteban Arévalo Ibáñez
Catalina García García-Herreros
Música y Espacio sonoro Shirin Azarnoush
Catalina García García-Herreros
Coreografía Catalina García García-Herreros
Control de luces Diego Arias Fuentes
Control de sonido Catalina García García-Herreros
Escenografía, utilería y vestuario Grupo Teatro Lunático
SOBRE ESTOCOLMO
Hace frío en la violencia.
Cinco personajes en escena, dos tiempos narrativos distintos, tres espacios
superpuestos y tres hilos que se anudan, o se enredan, para intentar llegar
al meollo del asunto: ¿Qué es “libertad”?
Estocolmo es un ensayo teatral que pretende indagar en nuestra idea, individual
y social, de libertad, tomando como punto de partida una situación
de secuestro como escenario límite. El horror que acciona la violencia de
una situación tal es el desencadenante de una trama argumental tejida en
torno a la pregunta sobre la realidad de las muchas libertades posibles y
sobre la necesidad de redefinir el concepto “libertad” en una sociedad cada
vez más expansiva y voraz en los recursos de su individual hedonismo.
Un hombre que, por cansancio, decide comprender las razones de su carcelera.
Una mujer que, por miedo, decide someterse al maltrato de su esposo. Una
mujer que, por lealtad, decide acallar el impulso de su fuerza de voluntad hasta
morir. Cinco víctimas que son, a su vez, los victimarios. Un secuestrado, un
preso, dos mujeres muy distintas y muy iguales, tres hombres que levantan la
voz y cinco personajes atados e inmóviles en la maraña de sus propias convicciones,
que tal vez sean las nuestras. ¿Cuántos de nosotros aceptamos de buen
grado la mordaza? ¿Cuántos de nosotros hemos sido uno de ellos?
Bienvenidos a Estocolmo. Será grato refugiarse
al amor de un escenario cuando hace tanto frío
adentro.
Catalina García García-Herreros
AGRADECIMIENTOS
A nuestros padres, dadores universales, por la inagotable generosidad.
A los maestros, a quienes fueron lectores primeros de un texto recién nacido, por la
acertada amabilidad en las palabras y por el amable acierto en los consejos.
A los poetas, por la inspiración y los epígrafes.
Al “Centro Cultural Miraltormes” por abrigar nuestros domingos de pasión.
A “Participación Ciudadana” por la llave mágica y por hacer posibles los primeros
pasos de estos personajes en un escenario “de verdad”.
A los conserjes de la Facultad de Filología, por la eterna y palaciega P1 en horario de
comedor.
A los lunáticos de antes (es decir, los de siempre: Miki, Toño, Esteban, Alberto, Andreína,
Daniela, Diego, Andrea, Cote, Roy, Lucía y Estela) y a los lunáticos de ahora (es
decir, los que, contra todos los elementos del azar, seguimos siendo), a los lunáticos
que viajan y regresan, a los que simplemente viajan y a los que nunca se van. (Soy
la Luna y ¡os quiero!).
A los libros, a la primavera, a los melocotones, a la música, a las palabras y, también,
por encerrarnos en casa, a la lluviosa crudeza del pasado invierno.
A los relojes que no marcan las horas.
A mi hermana, siempre y tanto, por la fuerza y por el ejemplo.
A usted, por ser y por estar.
A los amigos todos.
A los sueños que son vida en las tablas y a las tablas que hacen tangibles los sueños